
“Piratería es piratería, aunque venga en forma de prompt.”
Así comienza la demanda que podría cambiar para siempre las reglas del juego entre los estudios de cine y la inteligencia artificial generativa.El pasado 11 de junio de 2025, Disney y Universal presentaron una demanda conjunta contra Midjourney, acusando a la empresa de haber entrenado su modelo de IA con obras protegidas por copyright —sin permiso, sin licencia y sin compensación—.
Entre las obras afectadas: Spider-Man, Darth Vader, Elsa, los Minions, Shrek, Homer Simpson, y decenas de personajes más que forman parte del imaginario global.
⚖️ ¿De qué se acusa exactamente a Midjourney?
La demanda, de más de 100 páginas, se presentó en una corte federal de California. Alega que Midjourney:
- Usó obras protegidas para entrenar su IA sin autorización.
- Genera imágenes casi idénticas a los personajes originales, incluso sin necesidad de prompts explícitos.
- Funciona como una “máquina expendedora digital” de copias ilegales, accesible a más de 20 millones de usuarios.
- Obtuvo más de 300 millones de dólares de ingresos en 2024 aprovechando el uso de contenido protegido.
🧠 ¿Por qué esta demanda es histórica?
- Es el primer gran ataque legal de Hollywood contra una IA visual. Hasta ahora, las batallas se habían centrado en música (como con Suno y Udio) o texto (como el caso del New York Times contra OpenAI). Aquí, hablamos de imagen, marca e identidad.
- Pone en jaque el modelo operativo de Midjourney. Si el tribunal falla a favor de los estudios, la empresa podría enfrentarse a:
- Compensaciones millonarias.
- Obligación de implementar filtros IP.
- Restricciones para seguir entrenando su modelo con datasets sin licencia.
- Marca el inicio de una era de litigios por propiedad intelectual en IA. Otros actores —como Pixar, Netflix, Marvel o incluso videojuegos como Nintendo— podrían seguir el mismo camino.
🎨 El argumento de la industria del entretenimiento
Hollywood ha sido claro: la IA no puede ampararse en la innovación para justificar el uso indiscriminado de propiedad ajena.
“Esto no es inspiración. Esto es reproducción. Y lo están monetizando a escala global.”
La denuncia muestra ejemplos visuales impactantes: imágenes generadas por Midjourney que replican con precisión icónica a personajes protegidos. En algunos casos, ni siquiera es necesario pedir el personaje: la IA “reconoce” el estilo y lo ejecuta automáticamente.
🔍 ¿Cuál es la defensa de Midjourney?
Aunque la empresa no se ha pronunciado oficialmente, es probable que su estrategia legal se base en dos pilares:
- Uso justo (fair use): al argumentar que las obras generadas son “transformativas”.
- Neutralidad del prompt: insistiendo en que es el usuario, no la IA, quien activa la generación del contenido problemático.
Sin embargo, la defensa parece débil ante la abrumadora evidencia visual y la clara explotación económica del modelo.
🧭 ¿Y ahora qué?
El caso avanza hacia un juicio que podría sentar precedentes internacionales. Lo que está en juego no es solo el futuro de Midjourney, sino el modelo de negocio de toda la IA generativa visual.
Si se impone la visión de Disney y Universal, nacerá un nuevo estándar legal: entrenar modelos sin licencia podría considerarse ilegal por defecto.
Y eso no solo afectará a startups: también podría obligar a OpenAI, Stability AI, Adobe y otras grandes empresas a replantear sus fuentes de datos y licencias.
📌 Conclusión
La IA generativa se enfrenta a su primera gran batalla en Hollywood.
Una batalla que no solo busca proteger personajes, sino definir los límites entre creatividad, entrenamiento algorítmico y propiedad intelectual en la era digital.En Sombra Radio, seguiremos cada paso de este caso que podría redefinir la relación entre humanos, tecnología y arte.